Jesús Calleja se encuentra grabando los nuevos programas de "Volando Voy" para Mediaset. El aventurero ha decidido dar una entrevista donde ha hecho un repaso e su vida, sus inicios y además habla por primera vez de su hijo adoptivo oriundo de Nepal.
El presentador leonés ha hecho un pequeño alto en las grabaciones para hablar con la revista Semana y ha respondido del cambio de vida desde su León natal donde se ganaba la vida como peluquero para arrojarse a la aventura de recorrer el mundo.
Recientemente Jesús se ha aplicado la vacuna contra el Covid 19 y ha confesado que su felicidad por llegar sin haber contraído la enfermedad. Tan contento se puso por lograr lo que se había propuesto que comentó a la revista: "Le he pedido el vial de la vacuna a la enfermera y la he enmarcado en mi casa. He enmarcado el vial, la jeringuilla y la foto del momento de la vacunación".
Y ha explicado a que se debe tal emoción: "Creo que deberían darnos un premio a todos aquellos que no nos hemos contagiado. A lo mejor es absurdo lo que te estoy diciendo, pero tampoco es fruto de la casualidad. Yo tengo un trabajo que consiste en recorrerme medio mundo".
Luego de hablar de estos temas, Calleja se ha adentrado en su pasado y explicó el cambio de vida que hizo, "Mi padre me lo pegó porque era muy aventurero. Él me contaba sus historias cuando era pequeño y yo me las quedaba en mi memoria. Y me influenció tanto que al final he acabado donde he acabado".
A pesar que el aventurero lleva recorriendo varios años el mundo y ha alcanzado la cima del Everest en el año 2005 y en dos oportunidades ha ascendido a las Siete Cumbres, no ha abandonado su hogar en León: "Ese es mi remanso de paz y vivo donde quiero vivir, en el mundo rural, rodeado de naturaleza. Llevo 30 años viviendo allí, mis amigos son los de siempre, no ha cambiado nada en mi vida y sigo haciendo lo que me gusta y lo que me apetece".
Al momento de hablar Jesús, de la familia que ha construido explica que “Mi familia es mi nido. Es mi mayor privilegio” y comenta la historia que lo ha unido a su hijo adoptivo: "Un niño que venía del Nepal con una vida que no te voy a describir, dónde no hubiera sobrevivido si no hubiera sido por mí", un joven a quién ha criado en libertad y con quien tiene una relación muy abierta: "Yo no tengo que darle ninguna instrucción a mi hijo porque él me cuida más a mí que yo a él".
Actualmente su hijo que ha heredado la pasión por la aventura, ha estudiado electrónica pero es quién acompaña al presentador en sus viajes, “Desde hace dos años, se ha convertido en mi mano derecha. Es maravilloso trabajar al lado de tu hijo" y agrega "Yo no tengo un hijo biológico pero lo que yo siento por este chaval es inmenso". Al ser consultado si es feliz con este presente que tiene afirma que sí, es que además pese a las medidas contra el Covid afortunadamente nunca ha dejado de hacer lo que más le gusta, viajar y tener nuevas aventuras, y le quedan aún muchas más por delante.