El día de ayer, el mundo del deporte y el del espectáculo se vieron notablemente afectados por las polémicas confesiones que aparecieron en Twitter, de parte de 2 futbolistas de élite. María Patiño fue una de las personas que se refirió a ello y, con un tono contundente y tajante, criticó de manera fulminante a los implicados.
Periodistas, internautas e integrantes de la sociedad en general expresaron el malestar producido por las erráticas palabras que, en un comienzo, se le adjudicaron al exguardameta del Real Madrid. María Patiño, mientras estaba al aire en su programa, se enteró de lo que, supuestamente, había tuiteado el golero. Fue uno de sus compañeros quien le leyó, en vivo y en directo, la información que dio la vuelta al mundo.
"Espero que me respeten", se pudo leer, por unos minutos, en el Twitter de Iker Casillas. Allí mismo, hacia el final del "posteo", el histórico portero confesaba formar parte del colectivo LGBTIQ, convirtiéndose, así, en el primer atleta de esta disciplina que habla abiertamente sobre sus preferencias. Carles Puyol, histórico defensa del Barcelona, le habría respondido que ya era hora de contar la historia que vivían juntos. Una serie de "tuits" que, como no podía ser de otra manera, generaron curiosidad y revuelo.
La presentadora de "Socialité" no podía creer lo que le leía Laura Roigé, que fue quien se topó con la sonada publicación. A los pocos minutos de colgado el mensaje, cabe decir, fue borrado, tanto el del jugador de la Casa Blanca como el del blaugrana. Esto llevó a pensar en muchas cosas, e innumerables hipótesis se vertieron en portales y programas de televisión.
En el magacín, por ejemplo, especularon con la posibilidad de que el número 1 hubiese hecho esto en tono de "broma" para, así, frenar los rumores que lo acercan con la excuñada de Tamara Falcó. Como sabéis, en el "show" que mencionamos se ha vinculado al excompañero de Cristiano Ronaldo con la hermana de Íñigo Onieva, algo que no le habría gustado nada a uno de los mejores arqueros que ha visto España.
Así las cosas, la colaboradora expresó sus sospechas en torno a la veracidad del testimonio que, a pesar de haber sido eliminado, no cesó de circular ni un instante en redes. Horas después, el que fuera esposo de Sofía Carbonero volvió a la plataforma para aclarar lo sucedido. Según informó, su cuenta había sido "hackeada", es decir, "robada" por algún otro usuario. No obstante, varias personas dudan de que haya sido así, y, por el contrario, aventuran la posibilidad de que haya querido hacer una "broma" que, como manifiestan los hechos posteriores, acabó saliéndole muy mal.
La anfitriona del ciclo manifestó su descontento por esta situación: "Es que yo la gracia no le veo. Es que no sé cuál es el chiste, la verdad". Ella y sus colegas hablaron en nombre del colectivo y afirmaron que no es un asunto con el que se pueda bromear de ese modo, menos aún siendo una figura como lo es él. Sin ánimos de decir mucho más, la periodista aseguró: "Es que no me salen las palabras y prefiero que no me salgan, además, por el bien del programa".
María Patiño, al igual que una cantidad innumerable de internautas, reporteros y activistas condenaron las palabras que habría escrito el "hacker" que consiguió, por unos minutos, hacerse con la cuenta de Iker Casillas. Resta ahora saber cómo continuará esta historia y si el excampeón del mundo en Sudáfrica tomará algún tipo de acción judicial contra quienes habrían perpetrado este delito virtual. Tú, ¿qué crees que vaya a suceder?