Hay varias cosas que sabemos con certeza: el cielo es azul, dos más dos es cuatro y Lara Álvarez siempre presenta “Supervivientes”. Pues hay que poner esta última proposición en duda, porque en la próxima temporada del ‘reality’ no la estaremos viendo.
Lara Álvarez se despide del programa del que ha sido la cara principal por 8 años, y Laura Madrueño tomará su lugar. Nadie esperaba oír esta noticia, pero todo llega a su fin, y la periodista tiene la mente enfocada en nuevos asuntos.
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Para aquellos que desean saber los motivos concretos, lamentamos decepcionarlos. Solo sabemos lo que indican algunos rumores y lo que ha revelado Mediaset, que es que la reportera "disfrutará de un periodo de descanso para afrontar nuevos proyectos futuros dentro del grupo".
Por otra parte, “Lecturas” compartía una de las posibles razones de la partida de Álvarez, y explicaban que podría haber tomado esta decisión por cuestiones personales, es decir, ella habría elegido este nuevo camino. También apuntan a que, de esta manera, la comunicadora podrá disfrutar de un tiempo de vacaciones.
Tampoco descartan la posibilidad de que quiera sumergirse en nuevos proyectos. Tal vez, la periodista elige refrescar y enseñarle a sus seguidores y a los espectadores una nueva cara de ella que jamás pudimos conocer, pues es cierto que su participación en “Supervivientes” pudo haberse vuelto un poco monótona para ella.
No olvidemos que Lara también descartó la opción de presentar la segunda entrega de “Pesadilla en el paraíso”, que estará encabezado ahora por Nagore Robles. Ya antes de iniciar las grabaciones de este concurso, la presentadora exigió una serie de condiciones para aceptar el contrato, y es que participar de este tipo de producciones es algo muy demandante para ella, puesto que tiene que abandonar a su familia y su lugar de residencia por meses.
Todo parece indicar que Lara Álvarez se cansó de los ‘realitys’. ¿En qué se enfocará ahora? De seguro la veremos en un nuevo tipo de proyecto, pero todavía no hay ni indicios de qué podría ser eso que la periodista tiene entre manos. Deberemos esperar hasta el fin de su descanso para conocer la verdad.