El entrenamiento de alta intensidad o HIIT (por sus siglas en inglés) es una forma de ejercicio que combina períodos cortos de esfuerzo máximo con períodos de recuperación.
Existen muchos ejercicios que se pueden realizar en una rutina HIIT, ya sea con o sin material, en casa o en el gimnasio. Lo importante es elegir aquellos que nos hagan trabajar todo el cuerpo y que nos exijan al máximo.
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A continuación, te presentamos tres ejercicios de alta intensidad que puedes hacer en cualquier lugar y que te ayudarán a conseguir tus objetivos.
Burpees
Los burpees son uno de los ejercicios más completos y odiados que existen. Consisten en pasar de una posición de pie a una de flexión, y luego volver a saltar y aplaudir por encima de la cabeza. Con este movimiento se trabajan los brazos, el pecho, el abdomen, las piernas y el corazón. Para hacerlo más intenso, se puede añadir una flexión al final o un salto más alto.
Saltos de comba
Saltar la comba es un ejercicio que parece sencillo, pero que requiere de mucha coordinación, agilidad y resistencia. Se puede hacer con una comba normal o con una de velocidad, que es más ligera y rápida. Para aumentar la dificultad, se puede hacer dobles saltos, es decir, pasar la cuerda dos veces por debajo de los pies en cada salto. Este ejercicio es ideal para quemar calorías y mejorar la capacidad aeróbica.
Sentadillas con salto
Las sentadillas con salto son una variación de las sentadillas normales que añade un componente explosivo y pliométrico. Se trata de hacer una sentadilla profunda y luego saltar lo más alto posible, extendiendo las piernas y los brazos. Al caer, se debe amortiguar el impacto y volver a hacer otra sentadilla. Este ejercicio trabaja los glúteos, los cuádriceps, los isquiotibiales, los gemelos y el core.
Estos son solo algunos ejemplos de ejercicios de alta intensidad que puedes hacer en tu rutina HIIT. Lo ideal es combinar varios de ellos y hacer series de entre 15 y 30 segundos, con descansos de 10 a 15 segundos entre cada uno. Puedes hacer entre 3 y 5 rondas, dependiendo de tu nivel y de tu tiempo disponible. Recuerda calentar antes de empezar y estirar al terminar. Y sobre todo, ¡disfruta del ejercicio y de sus beneficios!