La vida de Tamara Falcó es digna de una película romántica, sobre todo los últimos meses. Después de que se diera a conocer, a mediados del año pasado, de que el que era su prometido la había traicionado, todos creímos que nunca volvería a darle una chance. Ella, sin embargo, el 31 de diciembre, sorprendió a propios y extraños al dejarse ver tomada de él en una Iglesia.
De un día para el otro no solo se reconciliaron, sino que también Tamara Falcó terminó su fugaz noviazgo con Hugo Arévalo, viejo conocido de ella y de Íñigo. El amorío con 'El Rey Midas de los negocios' fue uno de los más polémicos que vimos en el 2022 y, así como inició, finalizó.
Fue en 'El Hormiguero', ciclo en el que ejerce como colaboradora, donde confirmó que le había dado una segunda oportunidad al madrileño. En el espacio de Pablo Motos aseguró que estaba muy esperanzada y que confiaba ciegamente en que el mencionado "había cambiado" y que no volvería a cometer los mismos "errores". Allí, también, nos enteramos de que la boda que había quedado trunca al darse a conocer la infidelidad había recomenzado de cero.
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El Palacio del Rincón, heredado por la tertuliana de parte de su padre, será el escenario en el que vivirán el día más feliz de sus vidas. El próximo 8 de julio es la fecha marcada en los calendarios de toda la prensa, pues será cuando los veremos darse el "Sí, quiero". No obstante, no son los preparativos los que nos convocan aquí a hablar de ellos; por el contrario, lo que ha captado la atención de los reporteros ha sido el mal rollo que existe entre Isabel Preysler y Carolina Molas.
O, al menos, eso es lo que se especula, más aún después de que la Marquesa de Griñón hubiese asegurado que no tiene ningún problema con la que será su suegra. La madre de Íñigo Onieva no gusta de aparecer en cámara, y ello ha llevado a que las diferencias con la parentela de la creadora de contenido aumentaran de modo espectacular. Cabe recordar, para ilustrar ello, la carta que envió a varios programas de televisión exigiéndoles que dejasen de hablar de ella.
Así las cosas, la aludida habría confirmado que no se fotografiará ni con la ex de Vargas Llosa ni con Tamara Falcó, su hija, debido a que considera que una imagen así haría que la mirada de la prensa y las cámaras de los paparazzis se volcasen sobre ella. La tensión ha crecido en los últimos días luego de que la madre de Íñigo confesara que tiene muy poco vínculo con la 'socialité': "No la invité a cenar, no tenemos amistad y no quiero que se siga mintiendo", zanjó. Vosotros, ¿conocíais estos detalles?